Quienes visiten hoy el Sitio Histórico Estatal de Fort Ontario verán el fuerte en forma de estrella que data de principios de la década de 1840 con mejoras de 1863 a 1872. Hay dos garitas, un polvorín, un almacén, barracones para soldados rasos, un edificio de oficinas del Ejército, un cuartel de oficiales sin amueblar, vídeos, exposiciones y murallas azotadas por el viento con magníficas vistas del lago Ontario y casamatas y galerías subterráneas de piedra que se pueden visitar. El cuarto y actual Fuerte Ontario está construido sobre las ruinas de tres fortificaciones anteriores que fueron escenario de tres batallas de la Guerra Francesa e India y dos de la Guerra de 1812. Estuvo ocupado por el ejército estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial. De 1944 a 1946, el fuerte fue el único campo de refugiados de Estados Unidos para víctimas del Holocausto nazi, en su mayoría judíos, en virtud de una orden ejecutiva del presidente Franklin D. Roosevelt. En los terrenos del fuerte, abiertos todo el año desde el amanecer hasta el anochecer, hay un cementerio de posta con las tumbas de 77 oficiales, soldados, mujeres y niños que sirvieron en Fort Ontario en la guerra y en la paz. En 1946, Fort Ontario fue transferido al Estado de Nueva York y albergó a veteranos de la Segunda Guerra Mundial y a sus familias hasta 1953. En 1949 se inauguró como lugar histórico estatal.